domingo, 19 de diciembre de 2010

"El buen alcalde" de Andrew Nicoll, no es bueno ser tan bueno...

Decíamos ayer...
Imaginaos un pueblo ideal en algún país desconocido del norte de Europa. Allí todo el mundo es felíz, el pueblo es bonito y maravilloso, y Tibo Krovic lleva siendo su alcalde desde hace 20 años.
Imaginaos a un alcalde cuyo apodo es "el buen Tibo Krovic", que vive dedicado a servir a su pueblo y que no tiene vida privada.
Imaginaos a su secretaria, hermosa, infelizmente casada, deliciosa...
Imaginaos a ese alcalde, loco por ella, pero incapaz de demostrarle su amor.
Un día, a ella se le cae la comida a una fuente y él osa pedirle que coma con él.
El romance está servido. Pero...

Esta novela que yo encuadraría en ese género indeterminado de "novela de pueblo ideal, con gente estupenda pero con retranca", es muy entretenida, romántica y muy irónica.
Sin embargo, tiene un par de giros argumentales muy raros y bastante inverosímiles y fuera de lugar, al menos para mí. Claro que, algo diferente tenia que tener, ¿no?
Lo mejor son unos cuantos secundarios maravillosos como el abogado del pueblo, Yemko Gillaume, un orondo y aparentemente desagradable tipo que no es lo que parece. Y también son memorables Mamma Cesare y su hijo, regentes de la mejor cafetería del pueblo.

Amor, desesperación, dolor, artistas circenses fantasmas, una casa en la soleada Dalmacia, la Venus del Espejo de Velázquez... todo esto y más en una novela diferente y con algún cabo suelto, pero entretenida y muy bien ambientada (aunque sea en un pueblo imaginario).

2 comentarios:

  1. Creo que lo de los "giros" por llamarlo de alguna manera nos dejó a más de uno con la boca abierta. Mi hermana se pilló un cabrero de no te menees ¡ja,ja!
    En fin, a mí me gustó, pero estoy de acuerdo con tu título "no se puede ser tan bueno" Hubo momentos en los que quería darles un meneo a cada uno de los protagonistas para que espabilaran un poquito.
    Besos

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  2. Hola!! El primer "giro" aún... pero el segundo!!! A mí me fastidió el efecto general del libro. Hasta ese momento estaba a gusto, pero la verdad no lo entendí, no sé si pasaba de verdad o ella perdía la pinza, jajaja.
    Muxus!! Nos leemos!!

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